El corto lo forman una serie de consejos que un papá da un nuevo miembro de la comunidad mundial. Consejos ilustrados o resumido manual de instrucciones ante la vida. Es como advertir a cada recién nacido del galimatías que se va a encontrar en esta bola llamada mundo. FEBRERO DE 2006.
Papá, no entiendo algo, me dices que nunca deje de pensar, investigar, descubrir, aprender, que nunca dé nada por sentado y tú pareces tener tan claro ciertas verdades... ¿Es posible que llegue hasta el último cabo de la madeja sin estar "de vuelta"?
ResponderEliminarSigue contándome historias
Un montañero busca un oso por Asturias. Su mejor amigo le ha dicho que es un oso precioso. El nunca lo ha visto pero se fía de su amigo y emprende la marcha por los montes de Asturias soportando duras caminatas bajo el frio y el calor. No le importa. Se fía de su amigo y no es tan orgulloso como para desconfiar de su palabra.
ResponderEliminarUn buen día ve una pequeña huella. Su corazón se llena de alegría. Avanza y ve otra, y otra. Aunque no ha visto al oso, agudiza sus sentidos para seguir descubriendo más huellas de muchos tipos: recientes, antiguas, arañazos en árboles, cacas, etc. A veces se pasa semanas sin ver huellas y otras ve a montones. Cuando se lo cuenta a sus mejores amigos (como yo te lo cuento a tí) unos le creen y le acompañan al monte, pero otros resoplan o se burlan. Entonces se da cuenta de que sólo pueden ver las huellas del oso los que "quieran" buscarlas. ¿Trágico, verdad?
El papá del corto invita a no dejar de buscar nunca esas pistas, porque -¡amigo mío!- HAY pistas y hay oso. ¿Vamos juntos hasta el final de la madeja, despacito, despacito? No es fácil, así que nos necesitamos el uno al otro. Para comenzar tu propia y personal búsqueda del oso, debes comenzar fiándote de que hay pistas.
Enhorabuena. Esta segunda parte no la conocíamos. ¡Que suerte tienes de poder (saber) dejar a tus hijos imágenes y palabras de tu testimonio, tus proyectos, tus ilusiones...!
ResponderEliminar¡Queremos más!